Abjuré falsamente del compromiso ante vosotros,/ pero porque sé que el compromiso es ineluctable,/ y hoy más que nunca./ Y hoy os diré que no sólo hay que comprometerse escribiendo,/ sino viviendo:/ hay que resistir con el escándalo/ y con la rabia, más que nunca,/ (ingenuos como bestias) en el matadero,/ enajenados como víctimas, precisamente:/ hay que clamar más fuerte que nunca el desprecio/ contra la burguesía, gritar contra su vulgaridad,/ escupir contra la irrealidad que ha elegido como única realidad,/ no ceder ni en un acto ni en una palabra/ en el odio absoluto contra sus policías,/ sus jueces, su televisión y sus periódicos:/ y aquí/ yo, pequeñoburgués que lo dramatiza todo,/ tan bien educado por una madre de dulce y tímida alma/ (...) de moral campesina,/ quisiera hacer un elogio/ de la inmundicia, la miseria, la droga y el suicidio:/ yo, poeta marxista privilegiado,/ que posee instrumentos y armas ideológicas para combatir,/y suficiente moralidad para condenar el puro acto de escándalo,/ yo, hondamente respetable,/ pronuncio este elogio, porque la droga, el asco, la rabia y el suicidio/ son la única esperanza que queda:/ contestación pura y acción,/ con la que se mide la enorme sinrazón del mundo (...).
Pier Paolo Pasolini, Who is me.
1 comentario:
Ya no sé si lo único que queda es la negación mental de lo que hay.
Por cierto, su estilo me ha recordado al tuyo.
Qué gran texto!
Óscar
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